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Muchas veces el creyente de verdad verdad atraviesa por situaciones, las cuales Yahweh permite en su vida solo para posicionarlo en lugares más elevados, pero en tanto que somos posicionados en dichos lugares cosas ocurren en nuestras vidas y algunas las entendemos y otras no, en Génesis 26, todo el capitulo, encontramos un pasaje en la vida de Isaac en el cual le suceden situaciones como las que a 
Usted y a mi nos pueden ocurrir y de hecho nos ocurrirán, en este pasaje Isaac es exitoso en lo que hace, pero a medida que va teniendo éxitos surge la oposición en los que están a su alrededor. Y así ocurre con el creyente cada vez que va avanzando en su vida espiritual o material, Yahweh permite la oposición con un único propósito, que crezcas espiritualmente y prosperes.
Gen 26:1 Después hubo hambre en la tierra, además de la primera hambre que hubo en los días de Abraham; y se fue Isaac a Abimelec rey de los filisteos, en Gerar1. .2 Y se le apareció Jehová, y le dijo: No desciendas a Egipto; habita en la tierra que yo te diré. .3 Habita como forastero en esta tierra, y estaré contigo, y te bendeciré;…
Yahweh da una promesa a Isaac, diciéndole que lo bendecirá y que estará con el (v. 3a,b), solamente que no descienda a Egipto (v.2b) y que viviera como forastero en aquel lugar (v.3a).
La situación económica de esa época era difícil, había crisis de alimentos y mucha escasez por causa de la falta de lluvia y de aguas en aquella tierra. Estos versos de Génesis 26, tienen encerrada mucha sabiduría de Yahweh, pero solo abarcaremos tres puntos principales en particular y una consideración especial al final del presente estudio. 1. Cuando el Señor le dice a Isaac que no descienda a Egipto usa la palabra H3381 yarad (יָרַד H3381) «descender, bajar», esta palabra si bien tiene implícito el desplazamiento de un lugar a otro de forma espacial, es decir, moverse de un lugar a otro, su significado mas amplio y preciso es el de: estar en una posición elevada e ir a una de menor altura. Y esto mismo es lo que nos dice el Señor a nosotros los creyentes, que por mucha escasez o crisis económica que venga, no debemos descender de nuestra posición espiritual superior a una inferior, cuando el creyente usa las formas del mundo para solucionar sus problemas y dificultades especialmente en el área económica, desciende espiritualmente, estas formas son todas aquellas que pudieran hacerte pecar y faltar a la verdad de Cristo en tu vida. El creyente de verdad verdad prospera es guardando las palabras del Señor siendo obediente a ellas, meditando y esforzándose en hacerlas y vivirlas, al mismo tiempo que trabajamos en nuestras actividades diarias para ganar el sustento (Josué 1:7-9). Y justamente Isaac sabía estas cosas, por lo cual procuró hacerlas, sin embargo Yahweh conociendo el corazón de Isaac pudo observar en él la intención de ir a Egipto (sino fuera así Yahweh no le hubiera advertido que no descendiera allá), Isaac fue obediente, Isaac sembró en aquella tierra aquel año y cosecho al ciento por uno. Cuando Yahweh está contigo, donde otros fracasan tu triunfas (Salmos 37:19; Isaías 65:13), cuando Yahweh te ha dado promesas, solo debes esforzarte en poner en practica sus palabras, el hará todo lo que haga falta (Fil 4:19), Isaac no tuvo miedo en sembrar en aquella tierra aunque no se veía el agua por ninguna parte, Yahweh estaba respaldando su palabra que había dado a Isaac al decirle que lo iba a bendecir y que iba a estar con él (v. 3b,c). El no descender a Egipto significa “trabajar” en la obra de Yahweh que es usted mismo y la iglesia local, el no descender a Egipto significa “sembrar” la buena palabra en usted y en otros, el no descender a Egipto significa “esforzarse” por hacer y vivir la palabra de Yahweh, el no descender a Egipto significa “cuidar” la siembra para que te dé una buena cosecha, si solo trabajas en el mundo secular y no siembras o no riegas o no cuidas lo sembrado espiritualmente, no recogerás fruto alguno para vida eterna. Isaac sembró, pero también regó, y también se esforzó por cuidar su siembra, de no haberlo hecho, no hubiese cosechado ese año al ciento por uno, tu y yo debemos cuidar igualmente lo que sembramos en otros, a su tiempo recogeremos fruto para vida eterna. Juan 4:36 Y el que siega recibe salario, y recoge fruto para vida eterna, para que el que siembra goce juntamente con el que siega. 2. La palabra “forastero” en el verso 3 es la palabra H1481 gur (רוג H1481) «morar como un forastero, un transeúnte». Cuando el Señor le dice a Isaac que habite como forastero, le estaba diciendo varias cosas, entre ellas le decía: no tengas el ojo puesto en esta tierra, habita aquí como transeúnte, como alguien que va de paso, igual nos dice el Señor a nosotros, no tengas tus ojos en el mundo ni en su vanagloria, tu estas aquí de paso, tu ciudadanía esta acá en los cielos, eso es lo que nos dice el Señor a ti y a mi hoy día. 1Juan 2:17 Y el mundo pasa, y sus deseos; pero el que hace la voluntad de Yahweh permanece para siempre. Igual el Señor nos proveerá el sustento siempre y cuando no seamos perezosos ni negligentes en lo que tenemos que hacer humanamente hablando, debemos recordar que: 2Tes 3:10 Porque también cuando estábamos con vosotros, os ordenábamos esto: Si alguno no quiere trabajar, tampoco coma. Y aunque forasteros en esta tierra, es necesario que nos preocupemos cada día por ganar nuestro sustento y el de los nuestros, ya que: 1Ti 5:8 porque si alguno no provee para los suyos, y mayormente para los de su casa, ha negado la fe, y es peor que un incrédulo.
El forastero de aquellos días pasaba trabajo y todos lo miraban con recelo, pues desconfiaban de la forma en que había salido de su tierra natal, por eso era que ellos no confiaban mucho en Isaac y cuando vieron que por su trabajo tuvo prosperidad le tuvieron celos y envidia, hasta llegar a expulsarlo de aquellas tierras, así le pasa muchas veces al creyente, otros no te aceptan por su mal corazón lleno de envidia y de celos por lo que tu tienes y ellos no, ellos quisieran tener la paz de Cristo en sus corazones, pero no la tienen. 3. Cuando tu no desciendes a Egipto y habitas como forastero en esta tierra, entonces y solo entonces recibes bendición de Yahweh y él estará contigo; Isaac tuvo que sufrir el ser despojado, el ser envidiado, el ser expulsado de aquella tierra por las siguientes razones: primero Yahweh quería fortalecerlo espiritualmente, él había visto un bajón espiritual en Isaac (por eso le dice no desciendas a Egipto, además había mentido para salvar su vida(Gen 26:7-10) y no confío su vida a Yahweh como cuando su padre Abraham intento ofrecerlo en sacrificio), Yahweh fortalece al creyente de verdad verdad es por medio de las dificultades, y segundo para a la postre hacerle bien bendiciéndolo y prosperándolo, igual hará contigo y conmigo si bajamos espiritualmente y si estamos en medio de dificultades, animo, el galardón esta al alcance de nuestras manos espirituales y físicas.
CONSIDERACION ESPECIAL
Pero adicionalmente a estas dos razones encontramos que aquella tierra no era el lugar específico al que él Señor se refirió cuando le dijo:
Gen 26:2 Y se le apareció Jehová, y le dijo: No desciendas a Egipto; habita en la tierra que yo te diré. Isaac fue siendo desplazado paulatinamente de un lugar a otro, si dicha tierra donde Yahweh le había dicho que lo iba a bendecir hubiese sido aquella tierra, Yahweh no hubiera permitido que lo desplazaran, así que encontramos que Isaac sembró en aquella tierra y fue prosperado no porque aquella tierra fuera bendecida, sino que fue prosperado porque el era la bendición para aquella tierra, el cuidó de aquella tierra y de lo que había sembrado, en pocas palabras, el era el portador de la bendición, así tu y yo somos los portadores de la bendición y no el lugar donde estamos o donde estuvimos, recuerda que el Señor estará contigo en donde quiera que tu vayas y prosperas en todo lo que emprendas, y eso fue lo que el Señor le dijo a Isaac en el verso 3 … y estaré contigo y te bendeciré. Cuando seguimos leyendo encontramos con sorpresa que la tierra a la que el Señor se refería era a una tierra que estaba en lo alto de un monte, en Beerseba2 (su altura de 300 mts aprox. Gen 26:23 Y de allí subió a Beerseba), cuando el creyente sube a Beerseba tiene un encuentro con el Señor (Gen 26:24 Y se le apareció Jehová aquella noche, y le dijo: Yo soy el Yahweh de Abraham tu padre; no temas, porque yo estoy contigo, y yo bendeciré…), en esa altura Isaac extendió su tienda y su influencia hasta hacerse muy poderoso(Gen 26:25 Y edificó allí un altar, e invocó el nombre de Jehová, y plantó allí su tienda; y abrieron allí los siervos de Isaac un pozo.), es en esta tierra de Beerseba donde Yahweh tenia pensado llevarlo para bendecirlo y no en aquella tierra, así Yahweh tiene planes para ti y para mi, Yahweh quiere que tu y yo seamos capaces de subir a Beerseba y que extendamos nuestra influencia a otros, Yahweh quiere que tu y yo sigamos subiendo a Beerseba hoy en día, para ir a Beerseba se sube con un corazón limpio y manos limpias, para subir a Beerseba se sube de rodillas y con un corazón humilde, Para subir a Beerseba se sube con alegría en el rostro libre de amarguras, para subir a Beerseba solo basta ser obediente a las palabras del Señor. La palabra “plantó” del verso 25 es la palabra H5186 natah (הטָנָ H5186) «extender, alargar, estirar, desviar, apartar» tiene la connotación de extenderse para alcanzar una meta o un propósito, Isaac planto su tienda y se extendió buscando ser bendecido por Yahweh, ese debe ser tu pensamiento y el mío, plantar nuestra tienda en lo alto de Beerseba (en el monte de Yahweh) para extender nuestra influencia a otros que no conocen al Señor, y aun los enemigos Yahweh los hace que estén a paz con nosotros como ocurrió con estos filisteos que fueron a hacer la paz con Isaac, ellos tuvieron miedo de Isaac al verlo ahora nuevamente prosperado sintieron temor y fueron a hacer la paz (Prov. 16:13). Isaac perdonó las ofensas y agravios de los filisteos y lo que ocurrió fue que encontraron otro pozo de aguas, cuando tu y yo perdonamos al ofensor, la bendición fluye y es como un pozo de aguas para el sediento. Gen 26:32 En aquel día sucedió que vinieron los criados de Isaac, y le dieron nuevas acerca del pozo que habían abierto, y le dijeron: Hemos hallado agua, luego del perdón vienen BENDICIONES, el pozo dio agua después del perdón de Isaac al Ofensor.
