EH FULANO! (Ruth 4:1-22)

EH, FULANO!  (leer Deuteronomio 25:5-10 para comprender mejor este tema)

Deuteronomio 25:5 Cuando hermanos estuvieren juntos, y muriere alguno de ellos, y no tuviere hijo, la mujer del muerto no se casará fuera con hombre extraño: su cuñado entrará á ella, y la tomará por su mujer, y hará con ella parentesco.
6 Y será que el primogénito que pariere ella, se levantará en nombre de su hermano el muerto, porque el nombre de éste no sea raído de Israel.
7 Y si el hombre no quisiere tomar á su cuñada, irá entonces la cuñada suya á la puerta á los ancianos, y dirá: Mi cuñado no quiere suscitar nombre en Israel á su hermano; no quiere emparentar conmigo.
8 Entonces los ancianos de aquella ciudad lo harán venir, y hablarán con él: y si él se levantare, y dijere, No quiero tomarla,
9 Llegaráse entonces su cuñada á él delante de los ancianos, y le descalzará el zapato de su pie, y escupirále en el rostro, y hablará y dirá: Así será hecho al varón que no edificare la casa de su hermano.
10 Y su nombre será llamado en Israel: La casa del descalzado.

La historia de Noemí y Ruth la moabita es ampliamente conocida dentro del pueblo evangélico y cristiano, sin embargo hay un detalle muy pequeño sobre el cual nos vamos a referir, pero que tiene una gran enseñanza para nosotros los hijos de Yahweh.

Ruth 4:1-22
1 Booz subió a la puerta y se sentó allí; y he aquí pasaba aquel pariente de quien Booz había hablado, y le dijo: Eh, fulano, ven acá y siéntate. Y él vino y se sentó. 
2 Entonces él tomó a diez varones de los ancianos de la ciudad, y dijo: Sentaos aquí. Y ellos se sentaron. 
3 Luego dijo al pariente: Noemí, que ha vuelto del campo de Moab, vende una parte de las tierras que tuvo nuestro hermano Elimelec. 
4 Y yo decidí hacértelo saber, y decirte que la compres en presencia de los que están aquí sentados, y de los ancianos de mi pueblo. Si tú quieres redimir, redime; y si no quieres redimir, decláramelo para que yo lo sepa; porque no hay otro que redima sino tú, y yo después de ti. Y él respondió: Yo redimiré. 

La costumbre de la época exigía que el pariente más cercano decidiera si quería redimir (comprar) las posesiones de un pariente muerto incluyendo el desposar y recibir a los posibles hijos del matrimonio anterior como suyos propios, o en su defecto procrear nuevos hijos, pero que legalmente serian hijos del difunto y no de quien los engendro (esa era la costumbre)

5 Entonces replicó Booz: El mismo día que compres las tierras de mano de Noemí, debes tomar también a Rut la moabita, mujer del difunto, para que restaures el nombre del muerto sobre su posesión. 
6 Y respondió el pariente: No puedo redimir para mí, no sea que dañe mi heredad. Redime tú, usando de mi derecho, porque yo no podré redimir. 

Aquí queda más claro lo que habíamos dicho antes, pero el pariente cercano no quiso redimir, la razón que tuvo fue la que el mismo explica en el verso .6 el no quería sufrir “perdida” al comprar lo que era del difunto y luego tener que engendrar hijos y restaurar el nombre del difunto (hijos con la viuda), este pariente sabia que si hacia eso, entonces debía mas adelante repartirle a los hijos que tendría con la viuda lo que había comprado y entonces así pensaba el que saldría perdiendo en todo este asunto.

7 Había ya desde hacía tiempo esta costumbre en Israel tocante a la redención y al contrato, que para la confirmación de cualquier negocio, el uno se quitaba el zapato y lo daba a su compañero; y esto servía de testimonio en Israel. 
8 Entonces el pariente dijo a Booz: Tómalo tú. Y se quitó el zapato.
9 Y Booz dijo a los ancianos y a todo el pueblo: Vosotros sois testigos hoy, de que he adquirido de mano de Noemí todo lo que fue de Elimelec, y todo lo que fue de Quelión y de Mahlón. 

La mujer del difunto cuando era redimida algunas veces podía recibir una pequeña dote como compensación por causa de ser redimida las posesiones del difunto, en la época las mujeres no tenían derecho legal a poseer tierras ni ganados ni nada por el estilo, sin embargo si el gobierno de la época le reconocía algo aunque muy mínimo realmente, por eso era que ellas trataban de que fuesen redimidas las posesiones del difunto y porque prácticamente quedaban desamparadas.
 
10 Y que también tomo por mi mujer a Rut la moabita, mujer de Mahlón, para restaurar el nombre del difunto sobre su heredad, para que el nombre del muerto no se borre de entre sus hermanos y de la puerta de su lugar. Vosotros sois testigos hoy. 

Podemos observar que la intención no solo era redimir las posesiones sino también tomar a la mujer y tener hijos con ella, pero esos hijos legalmente llevarían el apellido del difunto y no el del padre biológico(eran las costumbres de la época).

11 Y dijeron todos los del pueblo que estaban a la puerta con los ancianos: Testigos somos.
Yahweh  haga a la mujer que entra en tu casa como a Raquel y a Lea, las cuales edificaron la casa de Israel; y tú seas ilustre en Efrata, y seas de renombre en Belén.
12 Y sea tu casa como la casa de Fares, el que Tamar dio a luz a Judá, por la descendencia que de esa joven te dé Yahweh

Los ancianos profirieron una bendición muy especial que luego veremos como resultó, legalmente ellos podían declararle esa bendición porque habían obrado en ley en todo este asunto.

13 Booz, pues, tomó a Rut, y ella fue su mujer; y se llegó a ella, y Yahweh le dio que concibiese y diese a luz un hijo. 
14 Y las mujeres decían a Noemí: Loado sea
Yahweh , que hizo que no te faltase hoy pariente, cuyo nombre será celebrado en Israel;  
15 el cual será restaurador de tu alma, y sustentará tu vejez; pues tu nuera, que te ama, lo ha dado a luz; y ella es de más valor para ti que siete hijos. 
16 Y tomando Noemí el hijo, lo puso en su regazo, y fue su aya. 
17 Y le dieron nombre las vecinas, diciendo: Le ha nacido un hijo a Noemí; y lo llamaron Obed. Este es padre de Isaí, padre de David. 

Conforme a la costumbre cuando la abuela tomaba el hijo en su regazo era un símbolo de adopción y una manera clara de recibirlo como si de suyo propio fuera el hijo, así que para efectos legales este hijo que había dado a luz Ruth la moabita realmente era hijo de Noemí(era la costumbre de la época).

18 Estas son las generaciones de Fares: Fares engendró a Hezrón, 
19 Hezrón engendró a Ram, y Ram engendró a Aminadab, 
20 Aminadab engendró a Naasón, y Naasón engendró a Salmón, 
21 Salmón engendró a Booz, y Booz engendró a Obed, 
22 Obed engendró a Isaí, e Isaí engendró a David.

Todo lo anterior se ha visto desde la perspectiva legal, pero aquí es donde está el pequeño detalle al que nos referimos al principio y es que ese pariente del cual no se anoto su nombre en la Biblia sino que se refiere a el como  Eh, fulano, este hombre  perdió la oportunidad de aparecer registrado con su nombre propio en las sagradas escrituras, fue su egoísmo lo que impidió que el fuera nada mas ni nada menos que el bisabuelo del rey David. Observe que Booz efectivamente menciona su nombre, es decir, ese día Booz pronuncio el nombre de este personaje, pero la escritura no lo registra.

Cuando el creyente es egoísta y no se compromete con la obra del Señor (no tiene nada que ver con dinero) se esta perdiendo de muchas bendiciones y beneficios que Yahweh  tiene dispuestas y preparadas solo para los generosos y limpios de corazón, Eh, fulano tenia los ojos puestos en lo económico antes que en lo que realmente tiene importancia para el Señor, considere lo que dice la palabra del Señor en:

Romanos 2:5-11
5  Pero por tu dureza y por tu corazón no arrepentido,  atesoras para ti mismo ira para el día de la ira y de la revelación del justo juicio de Dios,
6  el cual pagará a cada uno conforme a sus obras:
7  vida eterna a los que,  perseverando en bien hacer, buscan gloria  y honra e inmortalidad,
8  pero ira y enojo a los que son contenciosos y no obedecen a la verdad,  sino que obedecen a la injusticia;
9  tribulación y angustia sobre todo ser humano que hace lo malo,  el judío primeramente y también el griego,
10  pero gloria y honra y paz a todo el que hace lo bueno,  al judío primeramente y también al griego;
11  porque no hay acepción de personas para con Dios.

¿Eres de los que buscan gloria, honra e inmortalidad o de los que como  Eh, fulano no se atreven a arriesgar lo que tienen por egoísmo y atesorarlo para si?

El egoísmo de Eh, fulano le privo de que su nombre apareciera en la Biblia, no dejes que tu egoísmo te prive de aparecer en el libro de memoria de Jehová o en el de las Batallas de Jehová, vea estudio: LA BIBLIOTECA DEL SEÑOR.

Malaquias 3:16 Entonces los que temían a Jehová hablaron cada uno a su compañero;  y Jehová escuchó y oyó,  y fue escrito libro de memoria delante de él para los que temen a Yahweh,  y para los que piensan en su nombre.

Numeros 21:14 Por tanto se dice en el libro de las batallas de Yahweh:  Lo que hizo en el Mar Rojo,
 Y en los arroyos de Arnón;


Tus batallas son en el Señor y por el Señor, lo que hagas por el reino se anota en estos libros, espero que lo hayas entendido mi estimado lector, el Señor te guarde y tengas un corazón limpio y sincero comprometido con las cosas del Señor.

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