EL MATRIMONIO


EL MATRIMONIO
LA LEY DEL MARIDO Y EL ENYUGAMIENTO

Rom 7:2  Porque la mujer casada está sujeta por la ley al marido mientras éste vive;  pero si el marido muere,  ella queda libre de la ley del marido.


Para poder tener claro el misterio del matrimonio se debe entender algunos principios bíblicos que dan soporte y sustento a tal vínculo, uno de ellos es: La Ley del Marido, es un verso demasiado claro, para empezar dice que hay una ley para la casada que la mantiene sujeta, la palabra usada para decir “sujeta” es la palabra griega deo”, se usa también en «ligada» (1Co_7:39); y el marido a la mujer (1Co_7:27 : «ligado»), su significado primario es: «sujeto con dos cadenas», puede ser de usado de forma literal o figurada, en este caso se usa de modo literal, solo mientras el marido vive, esta palabra “ley” usada es la palabra “nómos”, usada para cuando una ordenanza se prescribe, es decir, es un mandato para alguien, dicho mandato tiene entonces su condición de vigencia, en este caso, la única condición es que el conyugue este vivo, pues como se dijo antes en 1ra Corintios 7:27 apunta en el sentido del hombre hacia la mujer, por lo que es aplicable en las dos vías.

Este “nómos”, fue prescrito por el Señor mismo, el primer matrimonio como todos sabemos fue el de Adán y Eva, cuando en Gen 1:27-28, 2:21-23, Dios le entrega a Adán su mujer y le llama ayuda idónea, la palabra que Dios usa para darle ese calificativo a la mujer es la palabra: H5048  נֶגֶד négued  frente, parte opuesta complementaria; espec. contraparte, o cónyuge. H5046  נָגַד nagád raíz primaria; propiamente afrontar, oponerse firmemente. H5828  עֵזֶר éter de H5826; ayuda:-ayuda idónea, ayudador, ayudar, socorrer, socorro. H5826  עָזַר  azár raíz primaria; rodear, circundar, proteger o ayudar:-aliado, amparo, ayuda, ayudador, ayudar, defender, socorrer, socorro.

Queriendo el Señor decir que le haría una ayuda que lo complementaria, pero que era su misma contraparte, la cual le ayudaría a suplir muchas de sus necesidades y que sería su aliada. Así es como debemos los esposos mirar a nuestras esposas, como un aliado que nos ayuda a seguir adelante capaz de ayudarnos en todo, por lo cual las mujeres también debe mirarse como esas ayudadoras y aliadas de sus esposos, con esa intención y por esa causa fue que el Señor hizo a la mujer, bíblicamente no se ve otro propósito, por eso es que Pablo dice en: 1Co 11:8  Porque el varón no procede de la mujer,  sino la mujer del varón, .9  y tampoco el varón fue creado por causa de la mujer sino la mujer por causa del varón. .10  Por lo cual la mujer debe tener señal de autoridad sobre su cabeza,  por causa de los ángeles.

Es en ese sentido que el verso 10 dice que la mujer debe entonces estar sujeta a su autoridad por causa de los ángeles, consideremos la expresión “,  por causa de los ángeles” aquí empleada: este término está en “acusativo” en el original, queriendo decirnos que los ángeles (ángeles, pastores, ancianos, diáconos) pueden juzgar la situación de sujeción de la esposa  a la autoridad inmediata  y actuar en consecuencia según se requiera  de allí que se requiere de la esposa una sujeción a su esposo para que los ángeles puedan ayudarle a ella de una manera más efectiva y que el enemigo no pueda ganar ventaja en contra de ella. Esta sujeción acompañada de la autoridad que Dios entrego al hombre sobre la mujer en:  Gen 3:16  A la mujer dijo: Multiplicaré en gran manera los dolores en tus preñeces;  con dolor darás a luz los hijos;  y tu deseo será para tu marido,  y él se enseñoreará de ti.

Hacen parte de lo que se conoce como la “ley del marido”, luego de la caída Dios puso a la mujer bajo la autoridad del hombre y hasta el día de hoy sigue siendo así, a pesar de que muchas mujeres no quieren someterse a sus maridos, cuando eso sucede, dicha mujer está quebrantando el mandamiento de 1Co 11:10  Por lo cual la mujer debe tener señal de autoridad sobre su cabeza,  por causa de los ángeles.

Aunque existe otro componente de la “ley del marido” el cual encontramos en Numero 30:1-2, 6-16, este componente es de tipo espiritual, ya que es bien sabido que de manera natural Dios ha puesto a la mujer bajo la autoridad del hombre, estos dos componentes son los que forman la “ley del marido”,  se expresa en: Rom 7:2  Porque la mujer casada está sujeta por la ley al marido mientras éste vive;  pero si el marido muere,  ella queda libre de la ley del marido.

Núm 30:1  Habló Moisés a los príncipes de las tribus de los hijos de Israel, diciendo: Esto es lo que Jehová ha mandado. 2  Cuando alguno hiciere voto a Jehová, o hiciere juramento ligando su alma con obligación, no quebrantará su palabra; hará conforme a todo lo que salió de su boca. 3  Mas la mujer, cuando hiciere voto a Jehová, y se ligare con obligación en casa de su padre, en su juventud; 4  si su padre oyere su voto, y la obligación con que ligó su alma, y su padre callare a ello, todos los votos de ella serán firmes, y toda obligación con que hubiere ligado su alma, firme será. 5  Mas si su padre le vedare el día que oyere todos sus votos y sus obligaciones con que ella hubiere ligado su alma, no serán firmes; y Jehová la perdonará, por cuanto su padre se lo vedó. 6  Pero si fuere casada e hiciere votos, o pronunciare de sus labios cosa con que obligue su alma; 7  si su marido lo oyere, y cuando lo oyere callare a ello, los votos de ella serán firmes, y la obligación con que ligó su alma, firme será. 8  Pero si cuando su marido lo oyó, le vedó, entonces el voto que ella hizo, y lo que pronunció de sus labios con que ligó su alma, será nulo; y Jehová la perdonará. 9  Pero todo voto de viuda o repudiada, con que ligare su alma, será firme. 10  Y si hubiere hecho voto en casa de su marido, y hubiere ligado su alma con obligación de juramento, 11  si su marido oyó, y calló a ello y no le vedó, entonces todos sus votos serán firmes, y toda obligación con que hubiere ligado su alma, firme será. 12  Mas si su marido los anuló el día que los oyó, todo lo que salió de sus labios cuanto a sus votos, y cuanto a la obligación de su alma, será nulo; su marido los anuló, y Jehová la perdonará. 13  Todo voto, y todo juramento obligándose a afligir el alma, su marido lo confirmará, o su marido lo anulará. 14  Pero si su marido callare a ello de día en día, entonces confirmó todos sus votos, y todas las obligaciones que están sobre ella; los confirmó, por cuanto calló a ello el día que lo oyó. 15  Mas si los anulare después de haberlos oído, entonces él llevará el pecado de ella. 16  Estas son las ordenanzas que Jehová mandó a Moisés entre el varón y su mujer, y entre el padre y su hija durante su juventud en casa de su padre.

Observe que si la viuda (que no se ha vuelto a casar) pronuncia lo mismo que la casada por no tener una autoridad inmediata (esposo), está obligada a cumplir, pero si esta viuda se casa nuevamente, vuelve a quedar sujeta a dicha ley, esta ley es tan del Señor que el mismo la respeta cuando el esposo viene y desautoriza cualquier cosa que haya dicho su mujer. ¿si el Señor respeta esa ley, por que el hombre pretende quebrantarla?

Queda claro por todas partes que la mujer esta puesta en sujeción por Dios respecto de su marido, y cuando no se respeta o se guarda este mandamiento, los ángeles de Dios legalmente no pueden obedecerle a la mujer en esos casos, pues es sabido por todos que el principio de sujeción es fundamental en el reino de Dios y cuando alguien lo quebranta ya no puede ejercer poder ni dominio ni carnal ni espiritual y entra en desobediencia, muchas veces la mujer entra en desobediencia por el mal testimonio del marido (cuando el marido no es convertido 100%), pero la ley del marido nada tiene que ver con el buen o mal comportamiento de su esposo, es una ley, y como tal debe ser cumplida por la mujer, desafortunadamente esta última situación (el mal comportamiento del marido) es la que las mujeres esgrimen para justificar su falta de sujeción, queda por descontado que si el marido es creyente la mujer debe estar sujeta a él de por sí, sin ningún tipo de objeción, atendiéndole y estando atenta a las necesidades de su marido (la ropa, la atención a la comida, sus necesidades intimas, etc.); Pero el caso que nos interesa es el caso cuando el marido no es creyente 100%  y la esposa esgrime objeciones sobre su sujeción, Dios no le da ninguna concesión a la mujer en este caso por esa situación, por el contrario le recuerda su sujeción (v. 6), y le impone una nueva carga y una forma segura de ganarse a su marido y de que él conozca al Señor, esto lo podemos encontrar en:

1Pe 3:1  Asimismo vosotras,  mujeres,  estad sujetas a vuestros maridos;  para que también los que no creen a la palabra,  sean ganados sin palabra por la conducta de sus esposas,

La palabra “sujetas” es la palabra: G5293 ὑποτάσσω jupotásso de G5259 y G5021; subordinar; reflexivamente obedecer:-bajo, sometido, sujeto, sumiso.

Aquí la palabra “ganados” es la palabra: kerdaino (κερδαίνω G2770) de ganar almas para el Reino de Dios mediante vivir el evangelio. (mas claro no puede estar!)

.2  considerando vuestra conducta casta y respetuosa. .3  Vuestro atavío no sea el externo de peinados ostentosos,  de adornos de oro o de vestidos lujosos, .4  sino el interno,  el del corazón,  en el incorruptible ornato de un espíritu afable y apacible,  que es de grande estima delante de Dios.
.5  Porque así también se ataviaban en otro tiempo aquellas santas mujeres que esperaban en Dios,  estando sujetas a sus maridos; .6  como Sara obedecía a Abraham,  llamándole señor;  de la cual vosotras habéis venido a ser hijas,  si hacéis el bien,  sin temer ninguna amenaza.

En el verso anterior la palabra “señor” es la G2962 κύριος kúrios de κῦρος kúros  (supremacía); supremo en autoridad, (como sustantivo) controlador; por implicación señor (como título de respeto)

Cuando el marido no es creyente 100%, solo la conducta casta y respetuosa de la esposa logran por el poder de Dios al cumplirles esta promesa (1 Pedro 3:1) que su esposo sea un hombre de Dios.

Un pasaje complementario lo encontramos en:

1Ti 2:8  Quiero,  pues,  que los hombres oren en todo lugar,  levantando manos santas,  sin ira ni contienda. .9  Asimismo que las mujeres se atavíen de ropa decorosa,  con pudor y modestia;  no con peinado ostentoso,  ni oro,  ni perlas,  ni vestidos costosos,  .10  sino con buenas obras,  como corresponde a mujeres que profesan piedad. .11  La mujer aprenda en silencio,  con toda sujeción. .12  Porque no permito a la mujer enseñar,  ni ejercer dominio sobre el hombre,  sino estar en silencio. .13  Porque Adán fue formado primero,  después Eva; .14  y Adán no fue engañado,  sino que la mujer,  siendo engañada,  incurrió en transgresión. .15  Pero se salvará engendrando hijos,  si permaneciere en fe,  amor y santificación,  con modestia.

En el anterior pasaje la palabra “mujer” es la palabra: G1135 γυνή guné mujer; específicamente esposa:-casado, esposa. Así que se está hablando en todo momento de la esposa, no de cualquier mujer sin marido, aunque es deseable que las solteras también hagan otro tanto. Contrariamente a lo que podría pensarse sobre el verso 11 y llegar a mal interpretarlo con sentido machista, existe una razón superior para que el apóstol Pablo escribiera de esa forma y esa razón la podemos encontrar leyendo desde el verso 11 hasta el 14, y esa razón es el principio de sujeción, lo que se espera es la sujeción de la esposa respecto de su esposo, situación en la cual no existiría machismo ni nada por el estilo, ya que se estaría cumpliendo la ley del marido. La interpretación machista por parte de las mujeres de este verso proviene realmente de un corazón falto de sujeción a su autoridad inmediata..


COMPLEMENTANDO

1Co 11:8  Porque el varón no procede de la mujer,  sino la mujer del varón,
La palabra “del” es la palabra: G1537 ἐκ ec o ἐξ ex; preposición primario denotando origen (el punto de donde procedo el movimiento o acción)

.9  y tampoco el varón fue creado por causa de la mujer,  sino la mujer por causa del varón.
G1223 διά diá preposición primario denotando el canal de un acto; mediante (en aplicaciones muy amplias, local, causal u ocasional)

1Co 14:34  vuestras mujeres callen en las congregaciones;  porque no les es permitido hablar,  sino que estén sujetas,  como también la ley lo dice. .35  Y si quieren aprender algo,  pregunten en casa a sus maridos;  porque es indecoroso que una mujer hable en la congregación.

La palabra “sus” es la palabra: G2398 ἴδιος ídios  pertinente a uno mismo, propio de uno; por implicación de carácter privado  privado o separado, propio, suyo.

Esta es la ley del marido y debe ser cumplida por la mujer mientras el esposo vive, por todo esto y mucho mas es que el Señor dice en: Mar 10:7  Por esto dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, Mar 8  y los dos serán una sola carne; así que no son ya más dos, sino uno. Mar 9  Por tanto, lo que Dios juntó, no lo separe el hombre.

En otras y mas cortas palabras mis queridos hermanos, cuando alguien esta casado(a), Dios los ve como una unidad, como una alianza de allí que lo que Dios une no lo separe el hombre (Marcos 10:8-9, de allí que el Señor Jesús Hablando del matrimonio hubiese dicho en: Mateo 19:.11  Entonces él les dijo:  No todos son capaces de recibir esto,  sino aquellos a quienes es dado.


LA AYUDA MUTUA

Efesios 5:22  Las casadas estén sujetas a sus propios maridos,  como al Señor; .23  porque el marido es cabeza de la mujer,  así como Cristo es cabeza de la iglesia,  la cual es su cuerpo,  y él es su Salvador. .24  Así que,  como la iglesia está sujeta a Cristo,  así también las casadas lo estén a sus maridos en todo. .25  Maridos,  amad a vuestras mujeres,  así como Cristo amó a la iglesia,  y se entregó a sí mismo por ella, .26  para santificarla,  habiéndola purificado en el lavamiento del agua por la palabra, .27  a fin de presentársela a sí mismo,  una iglesia gloriosa,  que no tuviese mancha ni arruga ni cosa semejante,  sino que fuese santa y sin mancha. .28  Así también los maridos deben amar a sus mujeres como a sus mismos cuerpos.  El que ama a su mujer,  a sí mismo se ama. .29  Porque nadie aborreció jamás a su propia carne,  sino que la sustenta y la cuida,  como también Cristo a la iglesia, .30  porque somos miembros de su cuerpo,  de su carne y de sus huesos. .31  Por esto dejará el hombre a su padre y a su madre,  y se unirá a su mujer,  y los dos serán una sola carne.

El hombre en cierta forma ayuda a la mujer casada a que sea salva y viceversa, ya que los dos son uno solo, por eso es que el mismo Pablo habla en: 1Co 7:16  Porque  ¿qué sabes tú,  oh mujer,  si quizá harás salvo a tu marido?  ¿O qué sabes tú,  oh marido,  si quizá harás salva a tu mujer?

Y justamente en el contexto se habla es del esposo y la esposa inconversa con un cónyuge convertido
1Co 7:12  Y a los demás yo digo,  no el Señor:  Si algún hermano tiene mujer que no sea creyente,  y ella consiente en vivir con él,  no la abandone. .13  Y si una mujer tiene marido que no sea creyente,  y él consiente en vivir con ella,  no lo abandone. .14  Porque el marido incrédulo es santificado en la mujer,  y la mujer incrédula en el marido;  pues de otra manera vuestros hijos serían inmundos,  mientras que ahora son santos. .15  Pero si el incrédulo se separa,  sepárese;  pues no está el hermano o la hermana sujeto a servidumbre en semejante caso,  sino que a paz nos llamó Dios. .16  Porque  ¿qué sabes tú,  oh mujer,  si quizá harás salvo a tu marido?  ¿O qué sabes tú,  oh marido,  si quizá harás salva a tu mujer?

Todo lo anterior ha sido para demostrar que no hay forma de disolver la unión matrimonial una vez consumada la unión intima que la muerte, es decir, desde la perspectiva del Señor el matrimonio es hasta que la muerte los separe, esto da para abordar nuestro otro tema complementario acerca del divorcio, denominado “EL DIVORCIO Y LA LEY DEL SEÑOR”

EL DIVORCIO Y LA LEY DEL SEÑOR

EL DIVORCIO Y LA LEY DEL SEÑOR (Parte I)


Antes de empezar a leer este estudio bíblico es necesario que usted lea nuestro estudio: EL MATRIMONIO

Esto porque usted debe tener bien claro algunos principios y leyes espirituales que Dios ha establecido en su palabra para regular este misterio que es el matrimonio, así que se requiere que lea estos estudios anteriormente citados, de no hacerlo talvez no pueda comprender a fondo el presente estudio y podría llegar a mal interpretar lo que aquí se dice, vamos: Mat 19:3  Entonces vinieron a él los fariseos, tentándole y diciéndole: ¿Es lícito al hombre repudiar a su mujer por cualquier causa?
.4  Él, respondiendo, les dijo: ¿No habéis leído que el que los hizo al principio, varón y hembra los hizo, .5  y dijo: Por esto el hombre dejará padre y madre, y se unirá a su mujer, y los dos serán una sola carne? .6  Así que no son ya más dos, sino una sola carne; por tanto, lo que Dios juntó, no lo separe el hombre. .7  Le dijeron: ¿Por qué, pues, mandó Moisés dar carta de divorcio, y repudiarla? .8  El les dijo: Por la dureza de vuestro corazón Moisés os permitió repudiar a vuestras mujeres; mas al principio no fue así. .9  Y yo os digo que cualquiera que repudia a su mujer, salvo por causa de fornicación, y se casa con otra, adultera; y el que se casa con la repudiada, adultera..10  Le dijeron sus discípulos: Si así es la condición del hombre con su mujer, no conviene casarse..11  Entonces él les dijo: No todos son capaces de recibir esto, sino aquellos a quienes es dado.  .12  Pues hay eunucos que nacieron así del vientre de su madre, y hay eunucos que son hechos eunucos por los hombres, y hay eunucos que a sí mismos se hicieron eunucos por causa del reino de los cielos. El que sea capaz de recibir esto, que lo reciba.
De la anterior forma el Señor Jesús deja en claro que no se acepta el divorcio bajo ningún otro aspecto salvo en que la mujer hubiera sido fornicaria, es decir, justo antes de que su prometido (futuro esposo) se llegara a ella sexualmente, y esta condición en ella seria de conocimiento del futuro esposo justo en el momento en que se llegara por primera vez a su mujer, al intentar el acto sexual el ya esposo se daría cuenta de que ella había fornicado, es solo en ese momento en el cual el hombre podría darle carta de divorcio, después de eso no seria posible y tendría que perdonarla, aun si ella mas tarde cometiera adulterio, el esposo está en la posición de perdonarla, pero si no la perdona y no la quiere recibir entonces si el quiere alcanzar el reino de los cielos debe quedarse como un eunuco (soltero y sin ningún tipo de relación sexual), por eso fue que los discípulos le dijeron al Señor Jesús  lo que dijeron en el verso 10 de Mateo 19, por que ellos en su corazón endurecido no estaban de acuerdo en perdonarlas si ellas les fallaban en cualquier otra área, aun en el adulterio, la respuesta del Señor es contundente y no deja lugar a maniobras extrañas ni fuera de las escrituras para justificar el divorcio de un matrimonio legalmente avalado por Dios y delante de los hombres. Todo esto lo confirma la escritura por lo dicho por Pablo en: 1Co 7:10  Pero a los que están unidos en matrimonio, mando, no yo, sino el Señor: Que la mujer no se separe del marido; .11  y si se separa, quédese sin casar, o reconcíliese con su marido; y que el marido no abandone a su mujer.
¿Mas para donde? El Señor no acepta el divorcio bajo ningún punto de vista, eso es claro y contra esta palabra no se puede pelear, sin embargo y si alguien quiere ser contencioso y persistir en divorciarse puede leer en: Mar 10:1  Levantándose de allí, vino a la región de Judea y al otro lado del Jordán; y volvió el pueblo a juntarse a él, y de nuevo les enseñaba como solía.
 2  Y se acercaron los fariseos y le preguntaron, para tentarle, si era lícito al marido repudiar a su mujer. .3  El, respondiendo, les dijo: ¿Qué os mandó Moisés? .4  Ellos dijeron: Moisés permitió dar carta de divorcio, y repudiarla. .5  Y respondiendo Jesús, les dijo: Por la dureza de vuestro corazón os escribió este mandamiento;
.6  pero al principio de la creación, varón y hembra los hizo Dios..7  Por esto dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, .8  y los dos serán una sola carne; así que no son ya más dos, sino uno..9  Por tanto, lo que Dios juntó, no lo separe el hombre. .10  En casa volvieron los discípulos a preguntarle de lo mismo,  .11  y les dijo: Cualquiera que repudia a su mujer y se casa con otra, comete adulterio contra ella;  .12  y si la mujer repudia a su marido y se casa con otro, comete adulterio.
RESUMIENDO
Si alguien está unido en matrimonio (sea hombre o sea mujer) según la ley de Dios no se puede separar salvo por la causal de Mateo 19:9, y si decide aun así separarse por la causa que invoque debe quedarse sin casar o reconciliarse porque si hace cualquier otra cosa comete adulterio.

ACLARANDO EL ERROR
Deu 22:13  Cuando alguno tomare mujer, y después de haberse llegado a ella la aborreciere, Deu 22:14  y le atribuyere faltas que den que hablar, y dijere: A esta mujer tomé, y me llegué a ella, y no la hallé virgen; Deu 22:15  entonces el padre de la joven y su madre tomarán y sacarán las señales de la virginidad de la doncella a los ancianos de la ciudad, en la puerta; Deu 22:16  y dirá el padre de la joven a los ancianos: Yo di mi hija a este hombre por mujer, y él la aborrece; Deu 22:17  y he aquí, él le atribuye faltas que dan que hablar, diciendo: No he hallado virgen a tu hija; pero ved aquí las señales de la virginidad de mi hija. Y extenderán la vestidura delante de los ancianos de la ciudad. Deu 22:18  Entonces los ancianos de la ciudad tomarán al hombre y lo castigarán; Deu 22:19  y le multarán en cien piezas de plata, las cuales darán al padre de la joven, por cuanto esparció mala fama sobre una virgen de Israel; y la tendrá por mujer, y no podrá despedirla en todos sus días. Deu 22:20  Mas si resultare ser verdad que no se halló virginidad en la joven, Deu 22:21  entonces la sacarán a la puerta de la casa de su padre, y la apedrearán los hombres de su ciudad, y morirá, por cuanto hizo vileza en Israel fornicando en casa de su padre; así quitarás el mal de en medio de ti. 

Muchas veces los más “inteligentes” tratan de demostrar que la palabra FORNICACION del verso 9 de Mateo 19 se debe aplicar al adulterio cuando ya la pareja tiene tiempo de estar viviendo y que por tal razón es una causal valida para el divorcio, pero por todo lo estudiado anteriormente queda claro que no se habla de adulterio en ningún momento en el contexto en que el Señor Jesús expresó su Palabra al respecto del divorcio, así que el adulterio delante de Dios no es una opción para divorciarse.  La palabra para fornicación en Mateo 19:9 es la palabra G4202 porneia (πορνεία G4202) se usa: (a) de una relación sexual ilícita (Juan_8:41; Hechos_15:20,29; 21.25; 1Co_5:1; 6.13,18; 2Co_12:21; Gal 5.19; Efesios_5:3; Col_3:5; 1Tes_4:3; Rev_2:21; 9.21; en plural en 1Co_7:2); en Mat_5:32 y 19.9 se usa denotando, o incluyendo, adulterio pero en este contexto se refiere es a fornicación; se distingue de ello en 15.19 y Mc 7.21; (b) metafóricamente, de la asociación de la idolatría pagana con doctrinas de la fe cristiana, y con la profesada adhesión a ella (Apoc_14:8; 17.2,4; 18.3; 19.2); algunos sugieren que este es el sentido en Apoc_2:21

No podemos sacar la palabra porneia del contexto y ese es el peligro y el error en su interpretación por parte de muchos, viendo este panorama de esta forma podemos entender que el matrimonio es algo sagrado y fundamental para Dios y que no se puede realizar a la ligera bajo ningún aspecto, sin embargo existen otras consideraciones sumamente muy especiales y que escapan al ojo natural y deben ser juzgadas a la  luz de la palabra del Señor y esas son las que vamos a considerar, pero con todo y que las consideremos debemos tener en cuenta que Dios es el que tiene la ultima palabra sobre el divorcio y el matrimonio.

CONSIDERACIONES
1. El Señor es quien junta o enyuga de acuerdo a Mateo 19:6 la palabra juntar es la palabra G4801
su(n) zeugnumi (συνζεύγνυμι G4801) enyugar juntos (sun, con; zugos, yugo). Se usa metafóricamente de la unión matrimonial (Mat_19:6; Mc 10.9).
2. Lo que el Señor junta o enyuga no está permitido que el hombre lo separe de acuerdo a: Mateo 19:6  Así que no son ya más dos, sino una sola carne; por tanto, lo que Yahweh juntó, no lo separe el hombre.
3. No debemos unirnos en yugo desigual con los incrédulos como lo dice: 2Co 6:14-16 
Aquí la palabra para yugo no es la misma que usa el Señor para unir o enyugar en matrimonio, se trata de la palabra: G2086 heterozugeo (ἡτεροζυγέω G2086) unirse en yugo desigual. Se usa en 2Co_6:14jeterozugeo (ἑτεροζυγέω G2086) estar desigualmente enyugados (jeteros, otro de una clase diferente, y A). Se emplea metafóricamente en 2Co_6:14  «No os unáis en yugo desigual».
4. Debemos llevar el yugo del Señor sobre nosotros como lo dice: Mat 11:29  Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas; .30  porque mi yugo es fácil, y ligera mi carga.
Aquí la palabra yugo empleada por el Señor Yahshua es la misma que se usa para unir o enyugar a una pareja, se trata de la palabra G2218 ζυγός
Zugós de la raíz de ζεύγνυμι zeúgnumi  (unir, específicamente mediante un «yugo»); unión, uncir, yugo, i.e. (figurativamente) servidumbre (ley u obligación); también (literalmente) travesaño de la balanza (como conectando) los platos:-yugo.

Si usted es observador se dará cuenta que la palabra heterozugeo es diferente zeugnumi y de zugos de allí también que se deba entender que no se esta hablando estrictamente del matrimonio, sino que se habla de forma general de vínculos en los cuales el creyente no tenga capacidad de maniobra y que por ello quede esclavizado de otro. Por eso es que nuestra relación con el Señor Yashua es como la de una esposa con su esposo, es decir, la de una novia y esposa que se guarda para su marido no teniendo adulterio, ni fornicación, ni idolatría con otros hombres o cosas, recordemos que la palabra griega para idolatría también significa fornicación y adulterio.

1Co 10:13  No os ha sobrevenido ninguna tentación que no sea humana; pero fiel es Dios, que no os dejará ser tentados más de lo que podéis resistir, sino que dará también juntamente con la tentación la salida, para que podáis soportar.
.14  Por tanto, amados míos, huid de la idolatría.  .15  Como a sensatos os hablo; juzgad vosotros lo que digo.


Observe que se habla en el contexto de las obras de la carne y sin embargo utiliza la palabra idolatría, esto es porque se está refiriendo a todo acto que involucre fornicación o adulterio espiritual o carnal.


EL DIVORCIO Y LA LEY DEL SEÑOR (Parte II)

Continuación de CONSIDERACIONES…

5.  El matrimonio, o unión, o vinculo, o enyugamiento delante de Dios es un pacto entre dos personas con él (Dios) como testigo principal y se supone que debe haber mínimo dos o tres testigos humanos que den fe de que se efectuó dicha unión, en el mejor de los casos y siempre que se pueda debe haber constancia documental o testimonial delante de los hombres de que se efectuó dicha unión.

Mal 2:14  Mas diréis: ¿Por qué? Porque Jehová ha atestiguado entre ti y la mujer de tu juventud, contra la cual has sido desleal, siendo ella tu compañera, y la mujer de tu pacto.  .15  ¿No hizo él uno, habiendo en él abundancia de espíritu? ¿Y por qué uno? Porque buscaba una descendencia para Dios. Guardaos, pues, en vuestro espíritu, y no seáis desleales para con la mujer de vuestra juventud.  .16  Porque Jehová Dios de Israel ha dicho que él aborrece el repudio, y al que cubre de iniquidad su vestido, dijo Jehová de los ejércitos. Guardaos, pues, en vuestro espíritu, y no seáis desleales.

Lo confirma la palabra en: Gál 3:15  Hermanos, hablo en términos humanos: Un pacto, aunque sea de hombre, una vez ratificado, nadie lo invalida, ni le añade.

Por todas partes la Biblia cierra puertas en el sentido del divorcio, sin embargo muchos hombres y mujeres se separan de sus esposos o esposas y contraen nuevas nupcias con otros(as), esto esta en la voluntad permisiva de Dios, pero no en la voluntad perfecta de él, ya debe estar claro que delante de Dios esa persona está en pecado, sin embargo Dios en su sabiduría infinita ha dado autoridad a sus ministros para que puedan trabajar  y de alguna manera ayudar en estas situaciones, pero sea cual sea la forma en que sus ministros ayuden, siempre deben hacerlo buscando que se cumpla la ley del Señor exactamente como el la dejó, escrita por eso es que ningún pastor por muy pastor que sea puede autorizar ningún divorcio, y en caso de autorizar una separación debe dejar constancia como la dejo Pablo de que la persona debe quedarse sin casar, lea: 1Co 7:.11  y si se separa, quédese sin casar, o reconcíliese con su marido; y que el marido no abandone a su mujer.

¿COMO OBSERVA DIOS ESTAS UNIONES IRREGULARES?

Desde luego que no las ve con buenos ojos y aunque sean hijos de Dios y vayan a la iglesia corren el grave riesgo de lo que se dice en nuestro estudio bíblico “DE QUIEN ES EL CUERPO”, le recomiendo que lo lea para que se actualice al respecto.

Dios no va a unirte en un yugo desigual de eso puedes estar seguro(a), pero de allí a que la unión matrimonial reciba la bendición de Dios hay que tener en cuenta que debe existir AMOR en la pareja, solo si hay AMOR Dios bendecirá y enyugara dicha relación, en los demás casos él solo operara como un simple testigo de los votos que la pareja haga delante de él, y como él es testigo fiel cuando la esposa reclame a Dios por alguna falta de su esposo tenga por seguro que aunque no exista amor, dicha reclamación tendrá validez jurídicamente hablando delante de Dios y Dios podrá actuar y hacerle justicia a dicho conyugue, el AMOR es el vinculo perfecto en el cual Dios une a los seres humanos en uno, lea:

Col 3:13  soportándoos unos a otros, y perdonándoos unos a otros si alguno tuviere queja contra otro. De la manera que Cristo os perdonó, así también hacedlo vosotros.
 Col 3:14  Y sobre todas estas cosas vestíos de amor, que es el vínculo perfecto. .15  Y la paz de Dios gobierne en vuestros corazones, a la que asimismo fuisteis llamados en un solo cuerpo; y sed agradecidos

El punto que queremos dejar en claro es que aunque Dios no bendiga el compromiso que haga el hombre con la mujer por no haberlos unido en AMOR porque muchas veces el hombre y la mujer se casan sin AMOR, eso no quiere decir que él (Dios) no sirva como testigo, por el contrario Dios es el mejor testigo de los votos y compromisos que haga el Hombre, de allí que la palabra del Señor nos insta a que: Stg 5:12  Pero sobre todo, hermanos míos, no juréis, ni por el cielo, ni por la tierra, ni por ningún otro juramento; sino que vuestro sí sea sí, y vuestro no sea no, para que no caigáis en condenación

Esto es por que con lo dicho por nuestros labios nos atamos y nos comprometemos como lo dice la palabra en: Pro 6:2  Te has enlazado con las palabras de tu boca,  Y has quedado preso en los dichos de tus labios.

En otras palabras lo que digamos aunque sea de corazón o no lo sea, nos obliga a cumplir y nos ata, estos temas son sumamente complejos y por eso es que se le ha sugerido que lea todos los estudios que se le han relacionado anteriormente para que evite falsas conjeturas que más bien saldrían de un corazón deseoso de abandonar una relación sentimental no conveniente o desagradable.

Para que vea mas claramente el panorama de cómo dios ve las cosas en estos casos leamos en: Núm 30:1  Habló Moisés a los príncipes de las tribus de los hijos de Israel, diciendo: Esto es lo que Jehová ha mandado. .2  Cuando alguno hiciere voto a Jehová, o hiciere juramento ligando su alma con obligación, no quebrantará su palabra; hará conforme a todo lo que salió de su boca.

Fíjese en esto ultimo, un juramento es un pacto o un voto como el matrimonial y aunque lo haga obligado(a) por las circunstancias no puede ser quebrantado, tiene que cumplir obligatoriamente con lo que haya dicho, y en el caso muy particular del matrimonio aunque haya sido efectuado en circunstancias complicadas y desafortunadas u obligadas por las circunstancias podemos entender que Dios realmente no va a bendecir dicha unión, pero tampoco deja de ser testigo, y aunque no aparezcan legalmente bendecidos por Dios, dicha unión tiene efectos espirituales delante de su presencia pues desobedecer estas palabras es ir en contra de su ley.

Ir más allá de lo aquí explicado es ir en contra de la ley del Señor, sin embargo es comprensible que muchas parejas cristianas o evangélicas vivan en adulterio o fornicación, en esos casos dichas personas solo pueden esperar hasta el juicio de Dios, el cual juzgara cada situación que haya vivido dicha pareja o persona, pero si ha leído nuestro estudio “DE QUIEN ES EL CUERPO” ya debe tener una ligera idea de lo que podría suceder, el único atenuante posible a la luz de la palabra, si es que se podría considerar como tal bajo estas circunstancias es que podemos leer en:

Mal 3:16  Entonces los que temían a Jehová hablaron cada uno a su compañero; y Jehová escuchó y oyó, y fue escrito libro de memoria delante de él para los que temen a Jehová, y para los que piensan en su nombre.  .17  Y serán para mí especial tesoro, ha dicho Jehová de los ejércitos, en el día en que yo actúe; y los perdonaré, como el hombre que perdona a su hijo que le sirve. .18  Entonces os volveréis, y discerniréis la diferencia entre el justo y el malo, entre el que sirve a Dios y el que no le sirve. 

Si eres de aquellos(as) que están en una situación que se conforma a esta enseñanza, lo que debes hacer es examinarte realmente sobre cuales son tus intenciones reales y proceder con mucha sabiduría apartándote del mal y del pecado, si has tenido una relación y esta ha sido presentada delante de los hombres por algún rito religioso lo mas seguro es que estés obligada por tus palabras a cumplirlo, en caso de que ya no sea posible cumplir dichos votos, la palabra del Señor dice que debes quedarte soltero(a) pues de unirte a alguien más cometes adulterio y al cielo no entran los adúlteros.

Gál 5:19  Y manifiestas son las obras de la carne, que son: adulterio, fornicación, inmundicia, lascivia, .20  idolatría, hechicerías, enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, disensiones, herejías, .21  envidias, homicidios, borracheras, orgías, y cosas semejantes a estas; acerca de las cuales os amonesto, como ya os lo he dicho antes, que los que practican tales cosas no heredarán el reino de Dios.

De allí que el Señor dijera que: Mateo 19:12  Pues hay eunucos que nacieron así del vientre de su madre, y hay eunucos que son hechos eunucos por los hombres, y hay eunucos que a sí mismos se hicieron eunucos por causa del reino de los cielos. El que sea capaz de recibir esto, que lo reciba.

Dios juzgara cada situación en particular, pero si tu puedes utilizar esta palabra (el que sea capaz de recibirla) para tu bien úsala, Dios es misericordioso y perdonador de cualquier transgresión excepto una sola (el que tuerce su palabra), así que si es posible recompón el camino y sírvele al Señor con todos tus recursos y fuerzas disponibles, el tendrá misericordia de todos aquellos que le sirven y los perdonara.

FINALMENTE Y PARA QUE NO HAYA MAS AMBIGUEDADES.


Ahora bien, debe tener en cuenta que el Señor no hablo en griego sino en hebreo / arameo, por lo cual él nunca pudo haber pronunciado la palabra “porneia” explicada anteriormente, acorde a las costumbres de la época y la concordancia de todo lo explicado por el Señor cuando dijo que el que repudia si se casa comete adulterio, esta última palabra también la dijo en hebreo, así que en este idioma que el Señor uso, existen dos palabras bien definidas para decir fornicación y adulterio, las cuales significan dos cosas diferentes, lastimosamente quienes han sufrido separación del conyugue pretenden por conveniencia aceptar la palabra “porneia” como si de adulterio se tratase, no siendo así desde la perspectiva del Señor y acorde a la gramática e idiosincrasia hebrea, para poder entender mejor el significado de estas palabras, נָאַף naáf = adulterio, usada en  Éxo_20:14  No cometerás adulterio, y zanah זָנָה = fornicación, usada en Lev 21:9  Y la hija del sacerdote, si comenzare a fornicar, a su padre deshonra; quemada será al fuego.

“נָאַף naáf = adulterio”, se usa de las relaciones sexuales una vez que alguien está casado legalmente con alguien y ha sido consumada la unión intima al menos una sola vez, mientras que “zanah זָנָה = fornicación”,  se usa de aquellas relaciones sexuales que se tienen antes de  que legalmente alguien haya tenido relaciones intimas con un esposo legal, esta palabra fue la empleada por el Señor en Mateo 19:9  Y yo os digo que cualquiera que repudia a su mujer, salvo por causa de fornicación, y se casa con otra, adultera; y el que se casa con la repudiada, adultera.


Esto se entiende mucho mejor si consideramos como era el matrimonio bíblico de aquella época, había un compromiso matrimonial, al igual que en muchas partes hoy día, los futuros esposo se comprometen a unirse en matrimonio y hacen preparativos, en esos días también era igual, lo que algunas veces sucedía era que aquella doncella, podía llegar a tener relaciones sexuales con alguien que no era su prometido, quien con antelación había pagado una dote al padre de dicha doncella en presencia de los ancianos de la aldea, de tal forma que legalmente/“técnicamente” esta mujer era suya por lo cual ella debía mantenerse pura para él hasta el día de las bodas, pero como dije antes, algunas veces esta doncella tenía relaciones íntimas con otro hombre diferente a su marido (recuerde que legalmente era su marido por haber pagado la dote), es a esta situación a la que el Señor se refiere al decir que salvo por causa de fornicación (zanah) es que se le permite dar carta de divorcio, aquí no entra para nada el adulterio (naáf), es por ello que los apóstoles, dicen que en ese caso no conviene al hombre casarse, la explicación es que ellos pensaban que si ellas eran infieles, es decir, después de casadas cometían adulterio eso no era causal de divorcio, a ellos no les convenía tal situación, pero el Señor se las pone difícil con lo que sigue diciendo en el pasaje de mateo y les dice que entonces tendrán que quedarse sin relaciones sexuales si quieren salvarse, es una palabra muy dura, claro que si, por eso él dijo que eso es solo para el que pueda recibirla y que todos no son capaces, el señor descarta el divorcio una vez que estés casado o casada, lo que una vez es unido por el Señor no se puede disolver a menos que sea por la muerte como ya hemos explicado, además el Señor es demasiado claro al decir que si el que se separa se vuelve a casar comete adulterio, si alguien pretende otra cosa pues allá el (o ella), el tal llevara su sentencia. Si tu situación es de separado y te volviste a casar, lo siento por ti, procura ver lo que haces, pero igual es como yo siempre digo, el que ignore que siga ignorando, y el que quiera hacer lo que le dé su gana que lo haga, el Señor lo juzgara.